miércoles, 2 de noviembre de 2016

Decepción




Desde la Asociación de Docentes Interinos de Castilla-La Mancha, sólo podemos expresar cómo nos sentimos desde que leímos el borrador del Pacto para la ordenación de las bolsas de interinos, con una palabra: decepción.

Ese sentimiento, se produce, al constatar de nuevo, cómo nuestros políticos menosprecian el sistema educativo público.  No contentos con haber mantenido los recortes de la legislatura pasada, que dificultan la labor de los docentes en todas las etapas, se empeñan en desperdiciar y despreciar la formación y experiencia de los docentes interinos.

Vemos con tristeza, que el borrador del Nuevo Pacto, es tan sólo de una copia del anterior, y que sigue perpetuando la INESTABILIDAD y la PRECARIEDAD LABORAL de los docentes interinos y sus familias. Tampoco incluye la contratación por curso completo, manteniendo la discriminación que sufren los interinos manchegos con respecto al resto de comunidades. Este sistema también ha demostrado que PERJUDICA en su conjunto a toda la Comunidad Educativa, y en especial a la EDUCACIÓN PÚBLICA.

Todos los que han trabajado en la enseñanza (como el consejero y el director de recursos humanos) saben que la estabilidad de las plantillas en un centro es clave para el buen desarrollo del proceso de enseñanza aprendizaje.

Un ejemplo sencillo, ¿Qué opinan los padres y madres cuando el tutor o tutora de sus hijos en el colegio cambia cada año y todo lo que ha aprendido sobre sus hijos, se pierde y el nuevo docente que venga debe empezar de cero?

Desde el punto de vista del funcionamiento del centro, la pérdida no es menor, pues cada vez que llega un docente nuevo debe aprender las normas y las dinámicas específicas que tiene. Además debe conocer las particularidades de cada clase y alumno, coordinándose con los otros docentes del centro. Cómo todos los procesos complejos, esto requiere de tiempo y es un absurdo que una vez conseguido, el docente pueda ser expulsado del sistema educativo por motivos que tienen que ver con realización de su trabajo diario, ni con su capacidad ni méritos profesionales.

¿Cómo hemos llegado a esto? El anterior ejecutivo ignorando estos hechos, decidió que 12 años de experiencia tenían el mismo valor que aprobar una oposición con un notable. Es evidente que los conocimientos no pueden sustituir a la experiencia como cualquiera que haya trabajado alguna vez sabrá. Esta situación, ha dado lugar a que, con los nuevos procesos selectivos, miles de docentes, con años de experiencia se hayan quedado sin trabajo, dejándoles tanto a ellos como a sus familias en una inestabilidad y precariedad sin precedentes.

El problema es que ahora, con un nuevo gobierno, cuyo consejero ha sido docente, quieren mantener este sistema sin apenas variaciones, incluso dejando al interino más desprotegido ya que proponen que únicamente se tenga en cuenta la nota de la última oposición, es decir, que los docentes interinos que han aprobado procesos selectivos anteriores, los mismos procesos que han otorgado plazas de por vida a otros docentes como ellos, no les sirva  ni tan siquiera  para obtener una puesto en la bolsa, algo verdaderamente increíble. 

Todo el sistema recogido en este pacto tenía un objetivo claro, según las declaraciones del gobierno que lo propuso y algunos de los sindicatos que los firmaron, dar una “oportunidad a los nuevos opositores, que no sacaron plaza” detrás de este eufemismo, lo que se quería decir es que, se repartiera el poco trabajo que quedó tras los recortes, eso sí, en condiciones aún más precarias, abriendo paso a un sistema de rotación de los trabajadores y trabajadoras en función de la nota obtenida en la oposición.  La calidad de la enseñanza, no tenía nada que ver con el sistema elegido, pues es evidente que la inestabilidad laboral, especialmente en temas tan sensibles y que comprende largos periodos de tiempo, como la enseñanza, no puede beneficiar al sistema.

Desde nuestra asociación, conocemos de primera mano las difíciles situaciones que tanto nuestros compañeros, como sus familias y  nosotros mismos sufrimos año tras año, viajando y cambiando de centro y vivienda cada vez que la Administración nos lo ha exigido, y adaptándonos con la máxima diligencia. Año tras año hemos cumplido,  soportando las incertidumbres de dónde vamos a trabajar (en muchos casos muy lejos de nuestros hogares), aceptando jornadas precarias, desde medias a quintos de jornada, vacantes que, en Castilla La Mancha, ni siquiera duran un curso escolar, períodos de sustituciones variables, desde días a meses….
Hemos sufrido los recortes más brutales de todas las comunidades autónomas, y no olvidemos, que estos han supuesto la pérdida de miles de profesores expertos y con experiencia, con la crisis social y familiar que conlleva, además del grave perjuicio que ha supuesto para al alumnado y sus familias.

Por todo esto, pedimos al consejero, que reflexione, que lo haga en base a su experiencia en la enseñanza pública, y que lo haga apartado de los motivos economicistas y populistas a corto plazo. Tampoco debe olvidar las últimas sentencias del Tribunal de Justicia de la Unión Europea, que indican que se está cometiendo un fraude de ley con la contrataciones sucesivas de los interinos y el coste que puede suponer a la administración hacerse cargo de las indemnizaciones que también reconoce este mismo tribunal.
Si se tiene clara la importancia de la Educación pública, no puede conformase con satisfacer a todas las partes, sino debe hacer lo más adecuado para garantizar el mejor servicio público posible; y eso, en el caso de la enseñanza, está ligado a la estabilidad de sus trabajadores y trabajadoras.